domingo, 27 de mayo de 2007

rojo maraco intenso

compró un vestido de fiesta. buscó pero no encontró fiesta para tan glamoroso vestido. desgarró el vestido de fiesta y quitó a medias el resto de la ropa dejándose caer al vacío de la cama.
así, a medio vestir, a medio desvestir, el rimel corrido, medio ebria medio sobria, metió su mano izquierda en la entrepierna

y dijo o quizás pensó. no. pensó y dijo: "esta casa respira y esta cama está tan vacía".

5 comentarios:

Anónimo dijo...

creo que suele suceder y creo que me pasara alguna vez, que pronto sera ese día cuando no de más de tratar de olvidar y me de cuenta que estoy sola, sola!!! y dire esta casa respira pero esta cama está tan vacía.
creo que sera más pronto de lo que pienso porque creo que en unas horas más cuando no de más de sueño y me vea obligada a acostarme en esa cama fría, pensare que hace una semana era la cama más tibia y ahora esta tan vacía.
snifff!!!
bye

Anónimo dijo...

este dia he leido 2 textos y ambos me han gustado mucho.
el primero:Leviatan
el segundo: rojo maraco intenso

Debo decir que lo que menos me gusta es el nombre,el resto esta muy bello, creo que no he leido tantas cosas tuyas pero esto sin duda es lo mejor que que te he leido. Me dan ganas de hacer una analisis tecnico de tu mini cuento pero no lo hare(gracias a dios), sin embargo no puedo dejar de decir que esta hermoso, tu cuento es hermoso y apasionado.

Un abrazo muchacha
cuidate mucho
ya nos vemos
bai

Fémina dijo...

como que si y como que no

Cuach Cuach dijo...

entonces yo no quiero nunca comprar un vestido de fiesta

Pau N. dijo...

Siempre todo el mundo tratando de rellenar el vacío. Medios ebrios y medios sobrios, siempre volvemos al vacío.